Los coches se adquirían en Italia, se matriculaban en España y pasaban de forma ilegal a Marruecos
Los vehículos se vendían en el mercado negro y denunciaban su robo con miras a cobrar el seguro
La Guardia Civil de Melilla, en el seno de la denominada 'Operación Albacete', dirigida y supervisada por el Juzgado de Instrucción número cuatro de la Ciudad, ha desarticulado una organización internacional que se dedicaba a la adquisición fraudulenta de vehículos de alta gama en Italia, para posteriormente, cuando contaban con la documentación en regla en España introducirlos en Marruecos donde se procedía a la venta para más tarde denunciar el robo y cobrar el seguro.
La primera fase de esta operación se remonta al pasado mes de junio de 2009, al detectarse por aquellas fechas la llegada a Melilla de vehículos de alta gama con matrículas españolas provisionales, «de color verde», que en fechas anteriores habían sido matriculados en las Jefaturas de Tráfico de las provincias de Albacete y Toledo.
Estos coches eran ocupados por sus titulares, de nacionalidad española, normalmente personas que aparentaban un poder adquisitivo medio alto que acto seguido pasaban a Marruecos en viaje turístico. Esta observación dio pie a una línea de investigación que ha permanecido abierta durante todo este tiempo, en la que se constataron indicios de crimen organizado para llevar a cabo la trama que tenían diseñada.
Modus Operandi
La rama establecida en Italia, alquilaban los vehículos a empresas de leasing o rent a car y los hacían llegar a España, donde se afincaba la estructura dirigente de la organización y captaban a personas, a las cuales matriculaban el vehículo a su nombre y a los que pagaban entre 1.500 y 3.000 euros. Para ello, utilizaban documentación falsa. De esta forma, los vehículos llegaban a Melilla o Ceuta vía marítima, con matrículas españolas y conducidos por sus titulares, con apariencia de normalidad y haciendo ver que se disponían a un viaje de placer hasta Marruecos. Una vez allí, el vehículo se vendía en el mercado negro africano, llegando a países como Mauritania, Mali o el mismo Marruecos. La singularidad de la operación consistía en que estos coches se denunciaban después como robados en Italia, no en España, con lo cual se hacía muy difícil seguir la pista de los mismos, «puesto que el vehículo con matrícula Italiana de origen, pasaba por Melilla y se introducía en Marruecos con matrícula legítima española».
En el seno de esta primera fase se han detenido un total de catorce personas, con el apoyo de las Comandancias donde se han realizado. Entre ellos, trece varones y una mujer: nueve ciudadanos españoles, siete de ellos en la provincia de Albacete, uno en Murcia, uno en Valencia y uno en Madrid.
Segunda fase de investigación
La investigación ha continuado en una segunda fase hasta estos días que se ha dado por finalizada al constatarse otra organización independiente de la primera que utilizaba el mismo modus operandi, con el siguiente resultado:
un total de nueve detenidos, seis españoles y tres marroquíes.
La investigación ha constatado el pase de 36 vehículos de alta gama por este procedimiento a Marruecos, su valor supera el millón trescientos mil euros, y las ganancias que se le atribuyen a la organización una vez cobradas las primas de los seguros y la venta de los mismos, dobla la cantidad fijada.
Los detenidos han pasado a disposición judicial y se les imputan, entre otros delitos de asociación ilícita, falsedad documental, estafa, hurto de vehículos y denuncias falsas. |