La Guardia Civil decomisa 500 kilos de droga en otros dos invernaderos descubiertos en Pinos Puente
En la foto: El invernadero de Maracena albergaba más de 400 plantas de cannabis
La Guardia Civil ha desmantelado tres invernaderos domésticos para el cultivo de cannabis sativa en las localidades de Maracena y Pinos Puente, y se ha incautado de más de novecientas plantas. En estas dos operaciones han sido detenidas tres personas como presuntas autoras de sendos delitos contra la salud pública por cultivo y elaboración de droga. Se trata de un matrimonio relacionado con el invernadero descubierto en Maracena y un hombre de veinticinco años de edad en Pinos Puente.
La primera operación tuvo lugar en Maracena y fue posible gracias a la colaboración de la Policía Local de esa localidad. Los agentes locales informaron a la Guardia Civil de que en un domicilio anejo a uno de los colegios del pueblo, presumiblemente estaban cultivando cannabis sativa.
Durante el registro la Guardia Civil comprobó que en la vivienda no habitaba nadie y que la pareja ahora detenida, que actualmente viven en Las Gabias, había habilitado cuatro de las habitaciones como invernaderos domésticos para el cultivo de cannabis sativa. Encontraron cuatrocientas veintinueve plantas. Los detenidos conseguían la electricidad necesaria para mover toda esta infraestructura del alumbrado público de Maracena, según informa la Guardia Civil.
Decomisadas más de quinientas plantas en Pinos Puente
Por otra parte, el Instituto Armado ha localizado otros dos invernaderos domésticos de cannabis sativa en Pinos Puente, en donde se han intervenido quinientas catorce plantas. Los invernaderos estaban situados en dos viviendas contiguas de un conocido barrio de la localidad. Los agentes encargados de la investigación buscan al propietario de la primera plantación hallada.
En la segunda vivienda, en una de las habitaciones de la planta superior, la Guardia Civil encontró setenta plantas más de cannabis sativa. En este caso sí fue identificado el propietario de la plantación. De hecho fue él mismo el que se identificó. El ahora detenido, al ver a los agentes sacando plantas de cannabis de la vivienda vecina pensó que éstos habían descubierto él también que cultivaba droga y decidió confesar y permitir que se registrara su casa. Curiosamente la Guardia Civil no sabía aún de la existencia de esta última plantación.

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